Me Huele a Caña

Me Huele a Caña

Creo que existen muy pocos vallecaucanos de mi generación que no hayan buscado la sombra de un samán o las refrescantes corrientes de un río para divertirse en familia y comerse un alucinante sancocho de olla. Hemos bailado salsa y encontrado el consuelo en un aguardiente Blanco del Valle. Tuvimos el privilegio de vivir en un valle verde, diverso, alegre y de puertas abiertas con todos. Poco nos gusta utilizar el “tu” y preferimos hablar de “vos”. Crecimos en medio de montañas y entre cañaduzales. Cañaduzales que han marcado nuestro pasado y seguro impulsarán el futuro.

Cuando nos visitan extranjeros se sorprenden al ver los cultivos de caña. Cuando se habla del Valle en otras regiones del país siempre nos asocian por ser los azucareros. Los que tenemos la fortuna y el privilegio de vivir en esta región nos enorgullecemos por ser dulces.

Pocos en la tierra del chontaduro pueden decir que no han tenido relación alguna con la agroindustria de la caña. La mayoría tenemos un familiar o un amigo que trabaja en ella, en una de sus plantas o en sus oficinas. Lo más probable es que conozcamos a alguien que tiene una finca sembrada en caña y que le vende su cultivo a algún ingenio. Seguramente tenemos a alguien cercano que le ofrece servicios o tiene relación comercial con el sector.

Pero de lo que si estoy seguro es que todos hemos endulzado nuestra alma con el jugo de nuestra planta emblemática.¿O no nos hemos comido un confite, postre o desamargado un café? A todos nos han dado combustible para seguir el camino. ¿O no has tanqueado tu moto o carro en estos días con gasolina? Gasolina que hace varios años tiene en su mezcla un porcentaje de etanol. Todos hemos iluminado nuestras ideas con ellos. ¿O no has prendido un bombillo o cargado tu celular últimamente? Ellos son hoy el mayor cogenerador de energía limpia y renovable de Colombia a través de la utilización de la biomasa de la caña.

Este sector nos viene impulsando desde hace más de un siglo, pero hasta ahora poco conocíamos, porque poco se hablaba, de como ellos han venido impulsando al Valle y al país. Veamos solo algunos ejemplos para no alargarme:

• Generan más de 180 mil empleos entre directos e indirectos que benefician a más de un millón de personas.

• Los trabajadores que se dedican al corte de la caña ganan en promedio 2.3 salarios mínimos.

• Apoyan a una red educativa compuesta por 34 instituciones y beneficia a mas de 16 mil estudiantes.

• Contribuyen el 1% de sus ingresos a la investigación y el desarrollo, invirtiendo más de 27 mil millones de pesos anuales en estos rubros.

• Son los cocreadores del Fondo de Agua por la Vida y la Sostenibilidad que incide en 24 cuencas hidrográficas que abastece de agua a cerca de 3 millones de personas.

• Producen bioetanol el cual reduce anualmente la emisión de 1.45 millones de gases efecto invernadero.

• Genera energía limpia y renovable que es suficiente para abastecer a 1 millón de colombianos.

Todo esto nos muestra que el sector viene contribuyendo a mejorar la calidad de vida, el desarrollo social y económico de nuestra región. Aplaudo que el renovado sector agroindustrial de la caña haya salido a cacarear con toda lo que ellos están haciendo para impulsar este país. Llevan muchas generaciones trabajando e incluso reinventándose para poder continuar contribuyendo a la transformación de nuestra región y generando el desarrollo del país. Los vallecaucanos nos debemos sentir orgullosos de lo que somos y de lo que ellos representan, porque una parte de nuestra esencia ha sido incrustada en nuestro corazón por un bagazo de caña. Párenle-Bolas que en el ambiente y en el aroma se siente. ¡HOY MÁS QUE NUNCA ME HUELE A CAÑA!

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12 comentarios en «Me Huele a Caña»

  • Edward Manjarres
    7 septiembre, 2017 a las 8:20 am

    Un buen resumen de las cosas que hacen enorgullecer al Valle del Cauca; sus grandes empresas pero de manera especial su gente….excelente blog…

    • Gabriel Velasco Ocampo
      7 septiembre, 2017 a las 10:40 am

      gracias

  • Guido Tejada
    5 septiembre, 2017 a las 12:34 am

    Nuevamente aciertas en la importancia de este sector para el desarrollo de nuestra región. Felicitaciones

    • Gabriel Velasco Ocampo
      5 septiembre, 2017 a las 6:56 am

      Gracias!

  • Maria Isabel Duque
    4 septiembre, 2017 a las 8:13 pm

    Cómo se explica entonces que el presidente Santos autorice la importación de etanol desde Estados Unidos, reemplazando el producto y el trabajo nacional por trabajo y etanol extranjero. INACEPTABLE

    • Gabriel Velasco Ocampo
      4 septiembre, 2017 a las 8:14 pm

      Inexplicable

  • gonzalo
    4 septiembre, 2017 a las 9:57 am

    Excelente que nos sintamos orgullosos de los logros de una industria q tanto le aportado al valle y al pais, que se conozca la realidad de sus aportes y su importancia para la región, y el pais.
    excelente columna gabriel, fuerte abrazo.

    • Gabriel Velasco Ocampo
      4 septiembre, 2017 a las 10:13 am

      Mil gracias!

  • Jaime
    3 septiembre, 2017 a las 11:10 am

    Siempre debemos sentirnos orgullosos de nuestras raices. Felicitaciones Gabriel, debemos hacer Patria desde las regiones y resaltar las cosas buenas, mas ahora que el pesimismo nos ronda.

    • Gabriel Velasco Ocampo
      3 septiembre, 2017 a las 12:49 pm

      Asi es! Mil gracias

  • Guillermo León Velasco Chica
    2 septiembre, 2017 a las 12:42 pm

    Excelente articulo

    • Gabriel Velasco Ocampo
      2 septiembre, 2017 a las 12:48 pm

      Gracias

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