¿Líderes o Fusibles?

¿Líderes o Fusibles?

La renuncia reciente de Cristina Arango a la gerencia de EMCALI, pone en evidencia un problema de fondo; y es la dificultad que tiene el sector público para atraer y retener talento. La rotación de quienes ostentan cargos de gran responsabilidad es muy alta, lo cual no permite dar continuidad a la gestión y a la estrategia a implementar. Los cambios constantes generan incertidumbre en los equipos de trabajo; dilatan la ejecución, debilitan la capacidad institucional y como consecuencia natural, disminuyen el desempeño y el resultado final.

Sin lugar a dudas, retener el talento es lo deseable, pero primero hay que atraerlo para poder cuidarlo. La pura y dura realidad, es que a las personas les da temor ir a trabajar al sector público. A algunos les preocupa el desprestigio que está asociado a quienes prestan este loable servicio. A otros, que las “IAS” les abran su expediente; como dicen por ahí, “a nadie se le niega una investigación.” La gente no está dispuesta a someterse a eso y quedar por un buen tiempo subiendo y bajando escaleras. Muchos se abstienen argumentando que lo único que les va sobrar a su paso por estas huestes, son los enemigos. A todo lo anterior, agreguémosle, que los salarios que ostentan la mayoría de los funcionarios públicos, no se acompasan con la remuneración de los cargos de igual responsabilidad en el sector privado.

A pesar de todo lo anterior y aunque les pueda generar suspicacia, lo cual no es la idea; el sector público logra atraer talento, pero no logra evitar que la rotación sea alta. Para darles un ejemplo de lo que les estoy hablando: el Presidente Santos ha tenido en sus 7 años de gobierno a: 7 Ministros de Minas, 6 de Justicia, 6 de Medio Ambiente y 6 del Interior; 5 Ministros de Transporte y de Trabajo y 5 Directores de Planeación Nacional, así como 4 Ministros de Salud y de Comercio.

Pero esto no solo pasa en el gobierno nacional, pasa en los regionales y municipales también. Revisemos, para poner un ejemplo algo más cercano, en Cali donde vivo. En los últimos 12 años hemos tenido en promedio por año un presidente del Sistema de Transporte Masivo – MIO. Vamos para el quinto gerente de EMCALI desde que las empresas públicas fueron entregadas de regreso al municipio. La rotación no solo ha sido alta en las entidades descentralizadas, también el gabinete del actual Alcalde de Cali ha presentado varios ajustes en este corto año y medio. Hemos tenido 3 Jefes de Gabinete y de Infraestructura, 2 Secretarios de Planeación, 2 de Transito y 2 de Seguridad o Gobierno; así como 2 Secretarios Generales.

El ciclo que cumplen los líderes públicos es muy corto y tienen un desgaste enorme. Parece que algunos se funden muy rápido, otros realmente no dan la talla y se deben remover; pero no podemos negar que también existen personas a las que les conviene que estos funcionarios no duren mucho. Las presiones que reciben estos individuos son de todo tipo, fuera de las naturales de su rol. Sobre todo, están las políticas. Presionan los cuerpos colegiados, los entes de control, algunos colegas y subalternos, así como los contratistas, entre otros para no alargarnos.

Preocupa sobre manera que el mensaje que se le está enviando al talento, no es el deseable. Le queda a uno la primera duda sí… ¿Lo que se requiere para estos cargos son líderes o fusibles? También se pregunta uno… ¿Quién querrá venirse a trabajar con este panorama y más entendiendo que su trabajo durará más o menos un año? Nada fácil las respuestas.

Como vemos, la problemática de la alta rotación del talento no es menor. Hay que “Pararle Bolas”. Vale la pena que empecemos a profundizar y analizar las graves consecuencias que está generando a la gerencia y administración pública, la falta de continuidad de líderes en sus equipos.

Termino como inicié; la alta rotación no permite dar continuidad a la gestión y a la estrategia a implementar. Los cambios constantes generan incertidumbre en los equipos de trabajo; dilatan la ejecución, debilitan la capacidad institucional y como consecuencia natural, disminuye el desempeño y el resultado final.

Como buenos gerentes que deben ser los gobernantes, tienen el reto monumental de preocuparse y ocuparse de gestionar su talento, conformar equipos articulados de alto rendimiento, que den continuidad y garanticen la implementación y ejecución de la estrategia diseñada.

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9 comentarios en «¿Líderes o Fusibles?»

  • submarinismos
    23 mayo, 2017 a las 11:05 am

    Muy buen análisis! Le agregaría al listado de características poco atractivas para trabajar en el sector público, las inhabilidades que se generan posteriormente.

  • Elbert Lopez -Aciem Valle
    21 mayo, 2017 a las 6:41 pm

    Interesantisima radiografia de la realidad actual, un editorial magistral que nos refresca el tema complejo de la gestion gerencial en la administracion publica, donde el margen de la maniobrabilidad queda bastante limitada a los intereses politicos y a la mafia de los mandos medios oficiales , hoy en dia el talento humano cada dia mas, huye de la administracion publica porque la función publica carece de orgullo, ser funcionario publico es arriesgar a ser calificado como ineficiente, incapaz y deshonesto y el sector publico no sabe valorar ni promover ni respaldar y menos retener ,primero esta la lealtad al jefe político , antes que la organización institucional

  • leonor
    21 mayo, 2017 a las 7:29 am

    Con el con el agravante que Emcali tiene cada vez un peor servicio….y era un y era una de nuestras empresas líderes!

  • Isaac Niño
    20 mayo, 2017 a las 2:57 pm

    Lastima que siga el Ministro de Hacienda y el predidente que arracaron, esos son los primeros que debieron salir.

  • Luis Felipe Bryon D.
    20 mayo, 2017 a las 2:53 pm

    Indudablemente es importante reiterar a los políticos que no metan las narices en los administradores y administraciónes, todo por sus intereses de poder. No es sino acordarnos de la presión que tuvo la gerente del Mio, Dra. María del Pilar, por el concejo de Cali y sus burocrátas, en cabeza de un político llamado Milton Castrillón, y que hoy es un quemador más por sus desaciertos, pero mientras hacia apología a la ignorancia, no dejo que el mio trabajará adecuadamente con la presión política, de medios, y economica. Debemos solicitar, presionar y obligar a que Zapatero a tus zapatos. De esta forma, líderes en formación no tendrán temor de afrontar retos empresariales y de preocuparse de otros problemas q no sean del cargo.

  • reinaldo charris moscarella
    20 mayo, 2017 a las 2:11 pm

    Canadá tiene en sus ministerios profesionales y tecnicos especializados en cada area aqui tenemos profesionales en busca de oportunidades. Con excepciones como el ministro de salud. Estrategia, no existen pues los objetivos son tambien politiqueros. Sin embargo seguir culpando al sistema no tiene sentido. Hacemos parte de el. Como dijo Cabral. “Es inutil que toques, estas adentro”. Seguir adelante es la consigna. Igual somos responsables. Un abrazo.

  • Manuel
    20 mayo, 2017 a las 1:57 pm

    Los cargos de mayor rango a niveles de lo nacional, regional y municipal, son del orden político Gabriel. Son los que llaman de libre nombramiento y remoción. Por tanto, muchas veces a aquellos quienes se preparan académicamente para llegar a altas posiciones gerenciales, poco les interesa encargarse de una gerencia o dirección. Pública, por esos dos factores apenas obvios. Existen ciertos cargos que tienen periodos fijos, pero igual son de resorte político, directores de hospitales, corporaciones regionales, empresas de servicios públicos, etc. Ahí es en donde llama la necesidad de profesionalizar el manejo del estado en cargos públicos de dirección , manejo y confianza, para que las políticas y metas que se establezcan se puedan cumplir con los mejores resultados.

  • Deiver Susa
    20 mayo, 2017 a las 1:18 pm

    Estoy de acuerdo con lo planteado en este artículo, sin embargo esto es resultado de la cantidad de gobiernos y administraciones corruptas que hemos tenido durante años, donde cada uno de estos talentos como dices llegan en busca de oportunidades de negocio que incrementen sus patrimonios y ni de habar de las puertas giratorias, los políticos no están interesados de invierte en educacacion, pues es la manera que las mismas familias continúen gobernando el pais, considero debemos llamar a la rebeldía ciudadana, ahora no mal interpreten esto cuando digo rebeldía ciudadana, yo lo que llamo rebeldia ciudadana es a prepararnos a preparar nuestros hijos, en darle ejemplo en hacer el bien sin mirar a quien, en buscar vivir en comunión, esto es ser rebelde en estos tiempos beligerantes, eso sí es ser rebelde, eso de cambiar el color del pelo, andar con Jens rotos, tatuajes etc no es ser rebelde es seguir unas minorías guiadas por tendencias, eso es seguir lo planeado por un estrategade Markering.

  • PAULO CESAR
    20 mayo, 2017 a las 11:24 am

    Definitivamente una administracion debe preveerse a traves de herramientas de planeacion pero sobre todo de un equipo base que no necesariamente sean los que ocupan los despachos. Establecer y medir un rumbo con estrategias ejecutivas y metas mas eficientes. Como la junta directiva en una empresa.

    Asi se apoya a un equipo que ya en cada despacho debe cumplir con perfiles y condiciones! Hasta ahora estan quemando gente buena personal y profesional! Pero ojo! Ellos tambien lo han aceptado y por el motivo que sea (orgullo o ganas de ayudar a mejorar) le estan dejando a Cali mas problemas de los que encontraron!

    Que bueno seria replantear el camino y mejorar mas con aptitudes que con actitudes! Pues el alcalde no esta preparado aun para administrar la coudad y peor aun enfrentar la corrupcion y la clase politica!

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